Contacte a la persona que debía haber contactado. No escribiré su nombre así de simple y sencillo. A mi protector confié todos mis temores, dudas y dolores. Mirar por mí, abrirme un pedacito de cielo y ayudarme a dejar de arrastrarme.
Magia le pedí.
Al día siguiente dolores de cabeza se apoderaron de la persona indeseada sucumiendola a un sueño profundo, se olvido en su trance quizá vio un nuevo horizonte sin mi. No me dejaría empaz hasta que fuera por amor propio.
Hace tres días perdí mi cartera con mis amuletos de la suerte. Una suerte que ya no me servía para nada. Todo esto fue un evento totalmente fuera de lo normal teniendo en cuenta que tenia más de 11 años con la misma cartera.
Ayer pase la noche del sábado solo. Una cosa que necesitaba y quería desde hace tiempo experimentar. Era muy probable que hoy domingo pudiera encontrarme con mi soledad.
Magia le pedí, y en magia estoy.
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